HISTORIA DEL TORERO

ÁNGEL LERÍA MARTÍN

Publicado el 14 de febrero de 2023
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Matador de toros que nación en Barcelona el 12 de febrero de 1968. En hermano del también matador de toros Manuel Lería Manolo Martín. Ha cursado estudios de derecho en la Universidad de Barcelona. Mató su primer becerro en Vinaroz (Castellón) el 11 de junio de 1981, alternando con Manolo Cascales y Curro Mora y novillos de don José Matías Bernardos. A partir de ese momento se integra en la cuadrilla de niños toreros de Barcelona, interviniendo en más de treinta becerradas. Su primera novillada sin picadores fue en Esplugas de Llobregat (Barcelona), a finales de ese año. Suma veinticinco ovilladas sin caballos en los años 1982 y 1983. Alcanzó señalados triunfos durante la campaña de 1982. En el coso de Vich (Barcelona), el 3 de abril, corta las dos orejas de un astado de José María Armillas, en presencia de Juan Linares, Marcos Valverde y Antonio Maravillas. Con sus compañeros José Monje, César Pérez, Juan España y Jesús Gouto, a los que se llamaba los niños toreros barceloneses, realiza una excursión a ruedos aragoneses, y más concretamente de la provincia de Zaragoza, y así el inmediato día 10 torean en Tauste y el 14 en Cariñena ganado del mismo hierro. En Ambas ocasiones le concedieron los mismos trofeos logrados en Vich. En los carteles siempre suprimió el apellido paterno. Durante la temporada de 1984 gana el trofeo donado por el Club Manolete de Hospitalet para el triunfador del modesto festejo celebrado el 19 de febrero en Cornellá de Llobregat. Compitió en tal oportunidad con José Gutiérrez, Miguel Mateo y David Valenzuela, quienes lidiaron reses de la vacada de los Hermanos Fauré. El 4 de  marzo de 1984 compite en Cornellá con Juan Linares, Antonio Maravillas y Manuel Porcel en la lidia de Bureles del hierro de los Hermanos Fauré, y le conceden dos apéndices y también el trofeo en disputa. Su presentación con los del castoreño tiene lugar en su ciudad natal, el 6 de abril de 1984, con Lucio Sandín y Álvaro Amores y con novillos de don Juan Andrés Garzón, con el positivo balance de cortar una oreja a su segundo enemigo, mientras daría una vuelta al ruedo después de estoquear a su primero. Termina esa primera campaña con picadores con siete novilladas en su haber, tres en Barcelona, tres en Palma de Mallorca y la otra en Calatayud.

Se lleva tres orejas del Coliseo Balear, de Palma de Mallorca, el 9 de septiembre del mismo año, de ganado de la divisa de El Campillo, en presencia de Luis Cancela y Fernando Lozano. Cumplimentó cinco contratos en corridas con caballos en esta temporada de 1984. Cuatro sumaría en 1985, entre ellas la segunda que toreaba ese año en Barcelona, teniendo esa tarde su bautismo de sangre; dos en 1986, una de ellas en Francia; trece en 1987, nueve en 1988; quince en 1989, tres de ellas en Francia, incluida la de su presentación en la plaza de Madrid, el 15 de agosto, actuando con Rafael Sandoval y César Pérez, en tarde en la que se lidiaron reses de la ganadería de don Francisco y don Cayetano Rivera Ordóñez y de don Gabriel Hernández García, correspondiéndole, por este orden, un ejemplar de cada divisa. El primero se llamó Tentador, estaba herrado con el número 4 y era negro bragado y meano. Vistió el novillero de rojo y oro. Se despide del escalafón en Éibar, el 25 de junio de 1990, con Luis de Pauloba y Felipe Martins, lidiando reses de don Antonio Pérez Angoso, cuando lleva toreadas tres novilladas. El 12 de agosto se doctora en tauromaquia en Barcelona, de manos de Víctor Mendes, quien, en presencia de Joselito, le cede la muerte del toro Emperador, número 14, negro de capa y con un peso de 535 kilos, que perteneció a la ganadería de Rio Grande. En esta ocasión viste de rosa y oro con remates negros. Solo torea esta corrida y otra en Tarragona ese año, cifra que no pasa de cinco en 1991, todas en Tarragona y Barcelona. Un paseíllo en 1992, cuatro en 1993 y tres en 1994, todos ellos en Barcelona, ponen, de momento, fin a esta biografía. El 6 de agosto de 1995 torea en Barcelona su última corrida, la única tarde en que vistió de luces en ese año. Alterna con Cristo González y El Tato y viste de azul y oro. Se le ovaciona en los dos toros de El Sierro que estoquea, el último llamado Morisco, número 4, negro bragado y meano, de 549 kilos. Así pone fin a su carrera.

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