Matador de novillos alicantino, cuyo nombre comenzó a sonar en el mundillo taurino durante la temporada de 1977, en la que tomó parte en trece corridas con picadores. El 16 de julio alternó en Alicante con Pepe Soler y la torera Maribel Atiénzar en la lidia de un encierro de Lázaro Soria y le conceden una oreja de su segundo oponente. Todavía logró mejor resultado el inmediato día 24, en Benidorm, al cortar un apéndice de cada uno de los astados de su lote, del hierro de Juan María Pérez-Tabernero, en presencia de Ortega Cano. En 1978 sufre un notorio retroceso en su carrera al intervenir únicamente en una oportunidad. Y ahí debió terminar su aventura en los ruedos, pues se pierde seguidamente su pista.