Matador de novillos que comenzó sus andanzas toreras formando parte, en la llamada parte seria de un espectáculo cómico-taurino. No dejaba de agradar su trabajo y consiguió torear, en tal categoría, un número aceptable de festejos. Entre ellos el celebrado en Oviedo el 2 de abril de 1961, con buen éxito. En la siguiente temporada figura ya en novilladas, aunque sin picadores, como la organizada en Sacedón (Guadalajara) el 30 de agosto, donde alterna con Carlos Bartolomé y Joaquín Camino, en la lidia de reses de Eugenio Ortega, Consiguió dar la vuelta al ruedo tras el arrastre de su segundo novillo. Posteriormente pierdo su rastro.