Matador de toros mexicano que nació en Guadalajara el 13 de abril de 1965. Vistió por vez primera de luces el 25 de julio de 1982, en su ciudad natal, con Roberto Miguel (hijo), Rigoberto Huerta y Manuel Verduzco de compañeros y novillos de Cerralbo. Le vieron actuar acertadamente en varias de las novilladas de agosto de 1983 en el coso de la ciudad azteca de Guadalajara. En tono menos actuó en la mencionada plaza el 16 de octubre del mismo año, en la novillada en que pisaron el ruedo los triunfadores de las anteriores funciones taurinas. En el monumental coso México, de la capital azteca, alterna el 19 de enero de 1986, en forma muy aceptable, con Hernán Ondarza y Alfredo Ferriño en la lidia de un encierro de la vacada de San Martín. No tarda en venir a España y el 24 de agosto del citado año isa el dorado albero del ruedo de la Real Maestranza sevillana, junto a José Bote y José Manfredi, con los que dio cuenta de ganado del hierro de Flores Albarrán. El azteca no destacó en tan importante oportunidad. El 28 del posterior septiembre se encierra en la Guadalajara azteca con un impresentable encierro de la vacada de Salitrillo, que no dio facilidades de lucimiento, y corta tan solo una oreja al salido en cuarto lugar. Por entonces se decía que su alternativa le sería otorgada en breve plazo. Se presenta en la México el 15 de diciembre de 1985, con Rafael Perea, Boni, y El Covo de alternantes; y reses de la divisa de don Felipe González. Se doctoró en Guadalajara, el 23 de noviembre de 1986, de manos de Fermín Espinosa. Armillita, en presencia de Alfredo Ferriño. El padrino le cedió la muerte del toro Parrandero, del hierro Coaxamalucán. Esa temporada intervino en dos corridas de toros. En las siguiente participa en un reducido número de festejos. Ocho en 1987, trece en 1988 y ocho en 1989. En 1990, año que suma siete corridas de toros, confirma en la México su doctorado, el 25 de enero. Es padrino de la ceremonia Humberto Moro (hijo), quien, en presencia de Francisco Dóddoli, le cede la muerte del toro Toledano, que luce la divisa de Venadero. En los siguientes años sigue toreando muy poco. Seis corridas en en 1991, ocho en 1992 y dos en 1993. En 1994 no se vistió de luces y en 1995, con datos hasta finales de agosto, lo ha hecho en tres ocasiones.