HISTORIA DEL TORERO

JOSÉ LUIS PÉREZ LOZANO (Niño del Tentadero)

Publicado el 6 de septiembre de 2023
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Matador de toros nacido en Écija (Sevilla), el 24 de agosto de 1968. Toma su apodo del lugar donde debutara sin picadores, La Venta del Tentadero, en Carmona (Sevilla), cuando solo contaba catorce años. Tomó parte en una corrida de promoción de nuevas figuras celebrada el 21 de agosto de 1983 en Ayamonte, en la que también participaron los noveles espadas Manuel Salas, Antonio Manuel Puertas y Manuel Díaz, Manolo. Se corrieron astados de la divisa de Javier Moreno de la cova, y le concedieron las dos orejas de la res que le correspondió. Pisa el albero de la plaza de la Real Maestranza de Sevilla el 7 de julio de 1985, para alternar con Rodrigo Galguera y José Manfredi en la lidia de bureles de la ganadería del conde de la Maza, y agradan sus maneras, en especial al muletear el novillo que cerró plaza, en el que lograría dar una vuelta al ruedo. Se encuentra en un momento interesante de su carrera, a falta de alcanzar un triunfo redondo que lo coloque en órbita en la difícil galaxia torera. Durante algunos años se va curtiendo en los llamados festejos económicos, hasta su presentación con picadores, en Sevilla, el 7 de julio de 1985, con Rodrigo Galguera y Pepe Manfredi, que también debutaba con los plazas montadas, para lidiar novillos del señor Conde de Murça. Fue esa su única aparición con vestido de luces en novilladas picadas, cifra que se repite en 1986. No me consta que interviniese en la temporada de 1987 y en la de 1988 le tengo anotada, otra vez, una solitaria actuación, en su Écija natal. Tampoco aparece en las estadísticas de 1990 y sí lo hace en las de 1991, con cuatro novilladas en cosos de escasa relevancia. Aunque con el denominador común de ser sus actuaciones en cosos de tercera o menos categoría, en 1992 consigue alternar en veinte novilladas picadas, algunas de ellas por pueblos próximos a Madrid y Ávila, en los que debe enfrentarse al novillo grande y generalmente limpio, siendo frecuente sus éxitos. Estos, sin duda, lo dejan bien clasificado y, sobre todo, preparado para emprender su mejor temporada, la de 1993, que comienza el 14 de febrero, en Samadet, siendo esta su primera actuación en el país galo. Alterna con el francés Frédéric Leal y Adolfo de los Reyes en festejo que se prologa con la actuación del rejoneador Damien Donzala. Los novillos que lidia pertenecen al hierro de los señores Hermanos Collado Ruiz. Su siguiente actuación, el 25 de abril, es en Barcelona, donde también se presenta, con José Carlos Lima y Abel Oliva, correspondiéndole en su lote dos novillos portugueses con el hierro de Simão Malta. Cuando empieza a declinar la temporada hace su presentación en la plaza de toros monumental de Madrid, lo que lleva a cabo el 12 de septiembre. Alterna con Ruiz Manuel, que también lo hacía en esta ocasión por vez primera en Madrid, y el malagueño Ricardo Ortiz. Los novillos son de Río Grande y el primero de su lote responde por Atlántico, era negro bragado y meano, estaba marcado con el número 11 y pesó 459 kilos. Se le ovaciona cuando termina con los dos ejemplares, dejando la impresión de ser un novillero con un buen sentido del temple, que torea de manera armoniosa, que tiene mucho que aprender y no poco que olvidar de los vicios que imperan en tantos otros toreros. No obstante, como he dicho, no defraudó en su presentación, hasta el punto de que volvería en las postrimerías del año taurino al coso de Las Ventas. Acaba la temporada con trece novilladas, tres de ellas en Francia.

En 1994 torea dos novilladas. La primera en Utrera, el 29 de enero, y la segunda en Madrid, el 13 de marzo, en la que sería su despedida del escalafón. Alternan con él Pepe Luis Gallego y Ricardo Ortiz y despacha con aseo dos novillos de La Guadamilla. En su ciudad natal tomó la alternativa, el 15 de octubre siguiente. Fue su padrino Miguel Báez, Litri, y presenció la misma Jesús Janeiro, Jesulín de Ubrique. Aquel le cedió la muerte del toro Ambulante, número 78, negro mulato que pertenecía al hierro de don José Luis Pereda García. Vistió el nuevo doctor de blanco y oro y cortó las dos orejas y el rabo del toro del doctorado y las dos del que cerró plaza, en corrida que fue transmitida en directo por televisión. A pesar de lo avanzado de la temporada, todavía sumaría un festejo más, en Gerena, el 30 del mismo mes, antes de dar por finalizada su primera campaña de matador de toros este espada, al que ha ayudado su paisano Pepe Luis Vargas. Un solo festejo de luces le apunté en 1995.

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